Olvídate del reloj, el teléfono celular y sumérgete en el placentero mundo de los masajesEFE
La actividad diaria y la vida frenética impiden que se disfrute de una vida en calma, tranquila, pero la solución está en los centros de belleza, donde se puede tomar un respiro después de un día duro.Una opción que acabará con el estrés, tonificará la piel, deleitará los sentidos y además subirá la autoestima, es el darse un masaje.Para todos los gustosExisten masajes para todos los gustos. Desde los que alivian tensiones y eliminan toxinas, hasta los que te permiten recuperar la vitalidad, recargar tu energía, pasando por los que tonifican y reafirman la piel, estimulan la circulación sanguínea, mejoran la respiración o curan contracturas.
Iluminación suave, música relajante, velas perfumadas, aceites esenciales y unas manos expertas son los elementos necesarios para conseguir la calma total, relájate y disfruta con todos los sentidos.
La actividad diaria y la vida frenética impiden que se disfrute de una vida en calma, tranquila, pero la solución está en los centros de belleza, donde se puede tomar un respiro después de un día duro.Una opción que acabará con el estrés, tonificará la piel, deleitará los sentidos y además subirá la autoestima, es el darse un masaje.Para todos los gustosExisten masajes para todos los gustos. Desde los que alivian tensiones y eliminan toxinas, hasta los que te permiten recuperar la vitalidad, recargar tu energía, pasando por los que tonifican y reafirman la piel, estimulan la circulación sanguínea, mejoran la respiración o curan contracturas.
Iluminación suave, música relajante, velas perfumadas, aceites esenciales y unas manos expertas son los elementos necesarios para conseguir la calma total, relájate y disfruta con todos los sentidos.
Masaje de cuatro manos Tumbada sobre una camilla, cuatro manos expertas envueltas en aceites esenciales, empiezan a trabajar los músculos de manera sincronizada, en diagonal y con movimientos circulatorios muy minuciosos. Luego pasan a realizar movimientos más largos hasta conseguir aliviar tensiones y deshacer contracturas musculares. El objetivo: relajar.
Masaje de bienestar Felicidad Carrera propone el tratamiento drenante corporal “Marino al aceite azul” porque posee propiedades que sedan, relajan y calman. En la primera parte del tratamiento se disfruta de la relajación con un masaje circulatorio que alivia las tensiones y de una suave exfoliación que provoca una descamación controlada. En la segunda parte se combina la aplicación de algas verdes y rojas en las piernas con una termoterapia en los pies a base de exóticos aceites esenciales y extractos botánicos que activan la microcirculación. Se termina el masaje con un drenaje linfático manual en el que se aplican algas pardas y mentol. Sus principios eliminan toxinas y aportan una sensación refrescante y tonificante muy agradable. Masaje californiano También conocido con el nombre de “sensible”, es un trabajo muy creativo donde el masajista con aceites esenciales y al ritmo de la música realiza una serie de pases lentos y regulares que dan lugar a la relajación de los sentidos y de la mente. Este masaje, que también se puede realizar a cuatro manos, consigue mejorar la elasticidad de la piel, fortalecer el sistema nervioso y aliviar el estrés.
Tratamiento ‘antidesfase horario’ Para desconectarse y renovarse, la firma Clarins propone varios masajes, verdaderas experiencias sensoriales que estimulan el cuerpo y la mente con aceites esenciales de romero, de manzanilla y de lavanda, flores de cártamo y extractos de limones. Indicado para los más viajeros. Exfoliación, hidratación y masajes en el cuerpo y en el rostro permiten olvidar suavemente la sensación de piernas pesados y los efectos de los desfases horarios. Resulta ideal para borrar las marcas de cansancio, renovar las energías y disfrutar de la estancia en el nuevo destino.
Hot-stone Cada vez más demandado, este masaje, que tiene su origen en Arizona, está indicado para todas aquellas personas que deseen acabar con las dolencias musculares y las tensiones nerviosas. La masajista utiliza piedras calientes de basalto —de distinto tamaño y a temperatura diferente— que va colocando debajo de la espalda, sobre el estómago, la nuca, las piernas, los brazos y entre los dedos de los pies con el fin de que el paciente recobre la energía, mientras el terapeuta realiza un masaje relajante con aceite de sésamo. La terapia termina con un ligero masaje con piedras frías para tonificar la piel.
Fuente:
El Mensajero
22 de Octubre de 2007
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