La utilización de productos de belleza de pésima calidad puede acelerar el proceso de envejecimiento o provocar problemas dérmicos, como manchas en la piel o acné.
Con información de BardotEl maquillaje es un aliado indiscutible para resaltar y acentuar los rasgos faciales, atraer miradas y proyectar la imagen que se quiere; pero, además de los colores y las tonalidades que van a mejorar la presentación de la piel, es clave tener en cuenta la calidad de los mismos debido a que pueden ser un detonante de alergias y microbios, así lo alertó Marcela Rodríguez, jefe de calidad de Bardot. Los cosméticos de baja calidad que se venden a bajos precios son un riesgo para la salud de las consumidoras y pueden provocar desde infecciones agudas –enrojecimiento, prurito o irritación ocular–, hasta crónicas. Otro de los efectos que pueden presentarse por el uso de este tipo de productos, señala la experta, son reacciones alérgicas a alguno de los componentes y que pueden ser desde leves hasta severas.Cuando no se conocen los ingredientes, indicó, para la elaboración de lápiz labial, sombras en polvo, delineadores, correctores o maquillajes en polvo de marcas no reguladas, es difícil tener un control sanitario de este tipo de productos, ya que su producción es informal. Otro de los problemas es que no tienen envases adecuados para estar completamente aislados de los contaminantes, se expenden en puestos antihigiénicos o son manipulados por los comerciantes; además, los posibles compradores los prueban y con esas acciones se contaminan de bacterias que pueden ser nocivas para la salud de quien los adquiere. Asimismo, estos cosméticos no cuentan con una fecha de caducidad y muchos de estos pueden ser una buena fuente de cultivo para bacterias. Lo recomendable, precisó Rodríguez, es no comprar este tipo de productos y, en caso de que no se tenga otra opción, se debe verificar que el empaque esté bien cerrado, que tenga la información adecuada de los ingredientes y que tenga una marca registrada. “En caso de que provoque alguna reacción adversa, se debe dejar de usarlo inmediatamente y consultar a un especialista”, añade. Para evitar estas consecuencias en la salud es mejor adquirir productos de buena calidad y de marcas reconocidas.La utilización de cosméticos de mala calidad contribuye a la aparición de acné, por ejemplo, que requieren de un tratamiento específico que varía en función de la gravedad de la enfermedad. “El uso de estos cosméticos obstruyen los poros de la piel, lo que significa un inicio del acné”, manifestó. Para tener en cuenta* Escoja productos que tengan certificación del Invima.* Verifique que los empaques estén en correcto estado, que no se encuentren rastros de otras etiquetas.* El maquillaje es de uso personal e intransferible, se contamina muy rápido. La costumbre de las mujeres de prestarse el maquillaje es perjudicial para la salud. Es un detonante de alergias y microbios.
Con información de BardotEl maquillaje es un aliado indiscutible para resaltar y acentuar los rasgos faciales, atraer miradas y proyectar la imagen que se quiere; pero, además de los colores y las tonalidades que van a mejorar la presentación de la piel, es clave tener en cuenta la calidad de los mismos debido a que pueden ser un detonante de alergias y microbios, así lo alertó Marcela Rodríguez, jefe de calidad de Bardot. Los cosméticos de baja calidad que se venden a bajos precios son un riesgo para la salud de las consumidoras y pueden provocar desde infecciones agudas –enrojecimiento, prurito o irritación ocular–, hasta crónicas. Otro de los efectos que pueden presentarse por el uso de este tipo de productos, señala la experta, son reacciones alérgicas a alguno de los componentes y que pueden ser desde leves hasta severas.Cuando no se conocen los ingredientes, indicó, para la elaboración de lápiz labial, sombras en polvo, delineadores, correctores o maquillajes en polvo de marcas no reguladas, es difícil tener un control sanitario de este tipo de productos, ya que su producción es informal. Otro de los problemas es que no tienen envases adecuados para estar completamente aislados de los contaminantes, se expenden en puestos antihigiénicos o son manipulados por los comerciantes; además, los posibles compradores los prueban y con esas acciones se contaminan de bacterias que pueden ser nocivas para la salud de quien los adquiere. Asimismo, estos cosméticos no cuentan con una fecha de caducidad y muchos de estos pueden ser una buena fuente de cultivo para bacterias. Lo recomendable, precisó Rodríguez, es no comprar este tipo de productos y, en caso de que no se tenga otra opción, se debe verificar que el empaque esté bien cerrado, que tenga la información adecuada de los ingredientes y que tenga una marca registrada. “En caso de que provoque alguna reacción adversa, se debe dejar de usarlo inmediatamente y consultar a un especialista”, añade. Para evitar estas consecuencias en la salud es mejor adquirir productos de buena calidad y de marcas reconocidas.La utilización de cosméticos de mala calidad contribuye a la aparición de acné, por ejemplo, que requieren de un tratamiento específico que varía en función de la gravedad de la enfermedad. “El uso de estos cosméticos obstruyen los poros de la piel, lo que significa un inicio del acné”, manifestó. Para tener en cuenta* Escoja productos que tengan certificación del Invima.* Verifique que los empaques estén en correcto estado, que no se encuentren rastros de otras etiquetas.* El maquillaje es de uso personal e intransferible, se contamina muy rápido. La costumbre de las mujeres de prestarse el maquillaje es perjudicial para la salud. Es un detonante de alergias y microbios.
Fuente:
La Crónica del Quindío
28/07/09
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